Zamenhof creció en un entorno multilingüe, donde el idioma era una barrera para la comunicación y la comprensión entre diferentes grupos. En 1878, a la edad de 19 años, comenzó a trabajar en un idioma auxiliar internacional que permitiera a personas de diferentes culturas comunicarse entre sí sin necesidad de aprender las lenguas maternas de cada uno.
Su objetivo era crear un idioma fácil de aprender, neutral y basado en la gramática y el vocabulario de las lenguas europeas. Después de 10 años de trabajo, Zamenhof publicó su primera versión del esperanto en 1887, bajo el pseudónimo Doktoro Esperanto (en español, Doctor Esperanza).
El esperanto se difundió inicialmente en Europa, y a lo largo del siglo XX se extendió a otros continentes. Aunque no se ha convertido en el idioma universal que Zamenhof soñaba, sigue siendo uno de los idiomas auxiliares internacionales más hablados y estudiados del mundo.